Para República Dominicana, la educación ha sido un enorme reto a los fines de lograr el desarrollo económico y social; no solo por las dificultades de cobertura, así además en la calidad del servicio. No es posible ocultar su todavía deficiente formación de los docentes, las debilidades del currículo y modelo de gestión educativa.
Para mejorar la calidad y resultados de los procesos derivados de “educación de calidad para todos y todas”, entre otros slogans, cuyos objetivos durante varios años se incluyeron dentro del Marco Plurianual para el Sector Público, en todos, se identificaron al menos cuatro importantes rezagos; la inversión, calidad docente, modelo de gestión y malla curricular. Hándicaps que se vieron reflejados posteriormente en los resultados de la educación superior.
Una parte de la ciudadanía entendía que, si se le asignaba y como en efecto se hizo, el 4% de PIB al capítulo de educación, se lograría la anhelada transformación del sector; no se entendió que la materia va abrazada a la investigación de calidad, innovación, la ciencia y tecnología. Los países desarrollados llegan a serlo por su enfoque prospectivo de la educación.
Durante varios años se dio por hecho que la orientación estratégica del tema respondería si se enfocaba solo en universalizar la educación desde el nivel inicial hasta completar el nivel medio, a través del incremento del acceso al último grado del nivel inicial; acceso a la educación básica; eficiencia interna del sistema; el acceso a la educación técnico profesional y reducción del analfabetismo. Hemos visto los precarios resultados, no es un tema de recursos o de atacar los síntomas, se trata de lograr que nuestro presente sea el futuro.
Si el interés es dar cumplimiento a la obligatoriedad constitucional de la enseñanza, el subsistema que genere las ofertas de formación y sus opciones vocacionales para la inserción en los mercados y/o estudios superiores, necesariamente deberá iniciarse desde el nivel preescolar con una proyección de mediano y largo plazo.
Las naciones que han alcanzado madurez en la educación lo han logrado a través de proyecciones. Proyectos estratégicos que dibujan los planes, elaboran los análisis y reflejan las posibilidades de su influencia en el futuro.
Debemos reconocer que todo no ha sido malo, amen del derroche de recursos en actividades o productos que no se corresponden con el objetivo esencial, intensiones si se han mostrado, respecto de garantizar procedimientos funcionales y agiles en la provisión de los servicios educativos públicos y privados. En lo adelante, las autoridades del gobierno central, junto a sus organismos INAFOCAN y el IDOSOFU tendrán la tarea del dar el giro que merece nuestro país.