La Marca
La Organización Mundial de la Salud ha reconocido hoy en rueda de prensa que de momento no hay una solución para acabar con el coronavirus a pesar de los avances en la búsqueda de una vacuna.
«No hay solución y quizás nunca la haya», así de contundente ha sido Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. El propio director del organismo mundial ha advertido que los efectos del coronavirus serán duraderos. «Esta pandemia es una crisis sanitaria que sólo se vive una vez por siglo y sus efectos se harán sentir durante décadas».
La pandemia de coronavirus ha superado ya los 17,6 millones de personas contagiadas, incluidas cerca de 680.000 víctimas mortales, en 188 países de todo el mundo, siendo Estados Unidos, Brasil e India los más afectados, según el balance proporcionado por la Universidad Johns Hopkins.
«Muchos países que creían haber superado lo peor están enfrentando rebrotes. Algunos que fueron menos afectados en las primeras semanas registran aumentos de casos y muertes. Y algunos que tuvieron fuertes brotes han logrado controlarlos. Mientras el desarrollo de la vacuna avanza en tiempo récord, debemos aprender a vivir con este virus y luchar con las armas de las que disponemos», ha afirmado.
Tedros ha concluido con una llamada a la responsabilidad de las Administraciones y de las personas. «De momento acabar con los brotes se basa en el control de la salud pública. Hay que hacer todo lo posible».