La política en la República Dominicana atraviesa un momento importante aunque estamos a tres años del año 2028. Con Abinader en el poder y habiendo liderado cambios significativos en la estructura política del país, es esencial evaluar el contexto actual y sus implicaciones para el futuro político dominicano.
Según la Constitución de 2015, un presidente solo puede gobernar durante dos períodos consecutivos. Tras ser reelecto, Abinader está impedido de aspirar a un tercer mandato. Su reforma de 2024 no solo reafirma esta restricción, sino que también elimina cualquier posibilidad de especulación sobre su continuidad en el poder más allá del límite establecido.
La búsqueda de un sucesor
Con Abinader fuera de la contienda presidencial, surge la pregunta sobre quién heredará su popularidad y liderazgo en el Partido Revolucionario Moderno (PRM). Entre los posibles candidatos, destacan Carolina Mejía, actual alcaldesa del Distrito Nacional, y David Collado, exalcalde y actual ministro de turismo.
Ninguno de los dos ha mostrado interés en la presidencia, pero cuentan con una base de apoyo sólida, lo que podría ser determinante para mantener al PRM en el poder más allá de 2028.
Carolina Mejía ha demostrado eficacia en su gestión como alcaldesa, ganándose la confianza de los ciudadanos. Esto se evidencia la victoria de febrero de 2024.
Por su parte, David Collado, un político cauteloso que cuuenta con el apoyo de un sector empresarial importante en el país, ha sido un actor clave en el gobierno actual, lo que le otorga una visibilidad y experiencia que podrían ser ventajas significativas en una contienda presidencial.
La oposición y el ascenso de Fuerza del Pueblo
Desde 2020, la oposición ha experimentado un cambio drástico con el ascenso de Fuerza del Pueblo (FP) como principal partido opositor y el declive del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Fuerza del Pueblo, liderado por el expresidente Leonel Fernández, ha logrado consolidarse rápidamente, alcanzando un 30% del electorado en las elecciones de 2024, lo que subraya su crecimiento exponencial en solo cinco años.
Por otro lado, el PLD ha sufrido una pérdida acelerada de influencia, pasando de ser la fuerza dominante durante 16 años consecutivos a convertirse en el tercer partido por membresía partidaria. Las malas decisiones de sus dirigentes y la falta de un liderazgo renovado han profundizado su crisis, y la posibilidad de una pronta desaparición ya no parece descabellada. Abel Martínez, su candidato presidencial en 2024, apenas obtuvo un 10% del electorado, y si este decide partir hacia la Fuerza del Pueblo, podría ser el golpe final para el PLD.
En el seno de Fuerza del Pueblo, las figuras de Leonel Fernández y su hijo Omar Fernández destacan como posibles candidatos presidenciales para 2028. Leonel, quien gobernó el país en tres ocasiones (1996-2000 y 2004-2012), sigue siendo una figura de peso político, con experiencia y una base de apoyo fiel. Su desempeño en las elecciones de 2024, donde llevó a su partido al 30% del electorado, reafirma su capacidad de liderazgo.
Por su parte, Omar Fernández ha emergido como una fuerza política ascendente. Su desempeño como diputado y posteriormente como senador del Distrito Nacional lo posiciona como una figura renovadora dentro del partido. En las elecciones de 2024, su victoria contundente contra Guillermo Moreno, respaldado por el PRM, demostró su capacidad para movilizar a los votantes y desafiar al oficialismo.
La decisión sobre quién será el candidato de Fuerza del Pueblo en 2028 podría depender de una evaluación pragmática: Leonel aporta experiencia y trayectoria, mientras que Omar encarna una imagen de cambio y continuidad generacional. Ambos son opciones viables, pero la elección final tendrá implicaciones estratégicas para el futuro del partido.
El Reto del PRM: sostener el poder sin Abinader
El PRM enfrenta el desafío de mantener su hegemonía más allá de 2028 sin la candidatura de Abinader. Carolina Mejía y David Collado se perfilan como los aspirantes más fuertes dentro del oficialismo. Mejía ha demostrado liderazgo en la gestión municipal, mientras que Collado ha sido clave en la promoción del turismo, un sector vital para la economía dominicana.
Sin embargo, la capacidad del PRM para unificar a su base y superar los retos internos será crucial. Además, deberá lidiar con el ascenso de Fuerza del Pueblo y su creciente atractivo para los votantes descontentos con el oficialismo.
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