Pavel Dúrov, el fundador y CEO de la popular aplicación de mensajería Telegram, fue arrestado en Francia, lo que ha generado nuevas inquietudes sobre la plataforma. Con aproximadamente mil millones de usuarios en todo el mundo, Telegram se lanzó el 14 de agosto de 2013 como una alternativa a WhatsApp y ha experimentado un crecimiento explosivo desde entonces.
Creada por los hermanos Nikolái y Pavel Dúrov, Telegram se destacó rápidamente por su enfoque en la seguridad y la privacidad, características que han contribuido a su expansión global. La aplicación está disponible en más de 20 idiomas y se sincroniza en la nube, permitiendo a los usuarios acceder a sus mensajes desde múltiples dispositivos simultáneamente. Además, Telegram permite compartir archivos de gran tamaño y crear bots y grupos con hasta 200.000 miembros.
Sin embargo, su popularidad también ha atraído críticas y preocupaciones. La capacidad de Telegram para alojar contenidos cifrados y permitir la formación de grandes grupos ha suscitado temores de que pueda ser utilizada para actividades ilícitas por parte de delincuentes y extremistas. Esto ha llevado a restricciones y bloqueos en varios países.
En la Unión Europea, por ejemplo, Telegram ha enfrentado limitaciones en los Países Bajos, donde se bloquearon canales que difundían teorías de conspiración, y en Alemania, donde se consideró la posibilidad de prohibir la plataforma debido a su uso por parte de grupos extremistas y antivacunas. También ha sido multada por incumplir leyes locales en Alemania y ha enfrentado solicitudes de adherirse a códigos de buenas prácticas contra la desinformación.
A nivel global, la aplicación ha sido bloqueada en varias ocasiones, incluyendo en Indonesia y Rusia, donde se levantaron bloqueos tras protestas. Irán y Tailandia también han impuesto restricciones por su rol en la organización de protestas, mientras que en Brasil, una suspensión fue revocada después de que Telegram colaborara con las autoridades.
Más recientemente, en marzo de 2022, el gobierno brasileño suspendió temporalmente Telegram por no colaborar con la justicia en la difusión de noticias falsas, aunque la suspensión fue levantada poco después. En agosto de 2023, Somalia prohibió TikTok y Telegram para evitar su uso en actividades terroristas.
En España, la situación llegó a un punto crítico cuando el juez Santiago Pedraz ordenó el bloqueo de Telegram en marzo de 2024, tras una denuncia de Mediaset, Antena 3 y Movistar Plus+ por la publicación de contenido protegido por derechos de autor. La orden fue retirada días después por Pedraz al considerar que su decisión podría ser desproporcionada y afectar la libertad de expresión.
La detención de Pavel Dúrov ha intensificado el debate sobre el futuro de Telegram y su papel en el intercambio de información en un contexto global cada vez más vigilado.